DIDIER LOURENÇO
Didier Lourenço
Premià de Mar, 1958.
"La pintura de Didier Lourenço sugiere mucha más de lo que muestra, y esto, en nuestros tiempos de predominio cruel de imágenes radicales y tan poco evocadoras, es un privilegio para los sentidos. Lourenço, un artista virtuoso del rostro humano, sabe cuidar los sentidos porque entiende la pintura como una experiencia vital que sacude y cautiva al visitante. No es extraño quedarse magnetizado un buen rato por alguno de sus cuadros, que supuran enigma por todas partes y son un canto a la "joie de vivre". - Maria Palau.